viernes, marzo 30, 2012

644. Reina por un día (III): Le Poinçonneur



Vaya por delante que esta entrada es para que se hubiese publicado en septiembre del año pasado, por lo que hay cosas que pueden sonar ahora un poco a chino o a agua pasada, pero en vistas a que llevo dos días chofs por causas ajenas a mi voluntad, iba siendo hora de darle al césar lo que es del césar.

Le Poinçonneur es un bloguero estilo "mosca cojonera", algo parecido al hijo secreto de Diógenes y Sócrates versión pantumaca. Ya me metió en el berenjenal de escribir la entrada de (¿)despedida(?) de su blog, y ya quedó latente que somos como el Guadiana o ese resfriado que parece curado pero que siempre vuelve...

Va por ustedes y va por él: 


Me pide Skyzos que, fenecido mi propio libelo, trate de exhumar lo que queda de mis neuronas en forma de unas letras para el suyo, éste que Vdes., sabios, consultan con apego laborables y festivos. Es tarea ardua, mas, ya de pequeño ejercí de bien mandao para los encargos familiares -paquetes de Ducados, helados veraniegos, pollos asados, barras de pan-: no veo ahora motivo para hacer de lo contrario.

Poco puedo decir de Skyzos que Vdes. ya no sepan. Que lo encontré tirando de Google en los inicios de mi trayectoria panfletera, a principios de 2009. Que El aeroguatutú fue, si mal no recuerdo, el primer cuadernillo que enlacé al mío, y que simpaticé de momento con un tipo que etiquetaba sus vivencias en base al cancionero de Fangoria. Convirtióse, así, Skyzos en un link, una referencia que durante meses no pasó de tal, sólo reconfortada por los mutuos comentarios blogueros, siempre correctos y dentro de la más estricta asepsia.

Como al año y medio junté arrestos y lo convidé a mi Facebook, descubriendo nombres mutuos y permitiéndole, en barrena, opinar sobre mis estilismos o la decoración de mi hogar. Opiniones que fueron ganando énfasis poco a poco, pasando del Face al Messenger, y de ahí a la broma, primero, y a la confidencia, después. Queden para nuestras Memorias respectivas.

Me gusta Skyzos porque es un tipo excesivo, y yo soy amante del exceso. Divertido hasta la lágrima. Imprudente, y yo predico la imprudencia. Relamido -nadie lució mejor un polo amarillo-. Al que cuesta, también, cogerle el punto -lo mismo se ofende por una nimiedad que amenaza en público con inminentes lesiones-. En suma, un tipo complicado, pero ya me dirán qué interés tienen los fáciles: menos que ninguno.

Querría, a estas horas, poder presumir de la amistad de un marica iridiscente a quien sólo he visto en directo en una ocasión, al calor de la mesa de una exquisita a quien desde aquí saludo. Las cosas que valen la pena, sin embargo, tardan en construirse, y a estas horas nuestro edificio no pasa aún del principal. Tiempo habrá.

Mientras tanto, déjenme dedicar estas líneas al compadre cibernético que me dibujó un cordero cuando se lo pedí.


 [Canción recomendada: Julio Iglesias y Jose Luis Rodríguez 'El Puma' "Torero"]

martes, marzo 27, 2012

643. Sabiduría popular

Hay que tener siempre el ojo limpio y abierto, y el oído preparado para captar las perlas que se escuchan a nuestro alrededor. 

Existe el ARTE, así en mayúsculas, en cada uno de los rincones de nuestra ciudad, sólo hay que ser receptivo. ARTE inconsciente, espontáneo, y ahí es donde está lo bello. No nace con esa idea, es puro, blanco, es el receptor quien lo dota de esa categoría... si hay la suficiente inteligencia como para captarlo. 

La sabiduría popular, que dicen. 

Este fin de semana, en una reunión de amigos, con mi familia postiza (en la que además de Mamma, tenemos Nonna) se escucharon dos perlas majóricas tales como:

"Mujer pequeña, siempre cachorra, nunca llega a perra." 
(Dichos traducidos de la Unión Europea.)

"¿Se te han muerto los pensamientos?" 
(Sobre una planta, pero a quien iba dirigido estaba ensimismado en ese momento, resultó una metáfora increíble.)

Luego te encuentras vídeos como el siguiente, sobre el falso documental que prepara Paco León, junto con su hermana, sobre su madre, y te das cuenta que el espíritu del Canomori sigue impertérrito:



Sonreír entre semana a veces es tan fácil...

[Canción recomendada: Alba Molina "Sevillanas de la vida"]

lunes, marzo 26, 2012

642. Con las manos en la masa.




Partamos de la base que, hasta ayer como quien dice, mis dos artes culinarias eran trocear cosas para hacer ensaladas y sacar las pizzas frescas del Mercapeich del envoltorio y meterlas al horno.

Y con eso se puede sobrevivir. 

Os lo aseguro. 

Tan inútil que, (¡verídico!), hasta finales del instituto no sabía ni freírme un huevo. Como mucho pillármelo con la cremallera del pantalón. Tuvo que venir un amigo (hetero) a enseñarme dos nociones mínimas de cocina para ir más allá de recalentar en el microondas las sobras del día anterior. (Y otro amigo -hetero, también- a enseñarme a planchar, pero eso es otra historia...) Ok. Hasta que vives en casa de mamá, pues puedes subsistir con pocas cosas, ya se encargaba ella de llenar el frederico para que sus hijos no pasaran hambre... La cosa está en que, al volar del nido, y con la lección aprendida de "el-día-que-te-independices-no-vengas-a-traerme-ropa-sucia-y-a-llevarte-tuppers" (a pesar de que esta última parte, como buena madre, se la salte a la torera cuando ella quiere), había que comer. 

Bien. Cuando te hartas de comida precocinada, pasta, saltos de verduras y cuando te das cuenta que no es que resulte muy rentable tirar de comidas para llevar, (por muy buenas que hagan las croquetas y las pechugas a la mostaza), no te queda otra que arremangarte y ponerte el delantal. 

En mi anterior reencarnación sueca, cuando me venían a mi sección a pedirme moldes para emplatar, sopletes y sifones de hostelería, me quedaba siempre con las ganas de preguntarles si sabían preparar un caldo con pelotas o un arroz con habichuelas. Que si REALMENTE sabían cocinar o era para darse el pegote. Y es que resulta más fácil apretujonar una ensalada en un aro de metal que pillarle el punto de sal y de comino a una olla gitana (a todo esto, no sé si lleva comino o whatelse...)


Así que, tiras de mamá, y el pides ayuda... Todavía estoy en el paso de <<¿Cuánta sal le echo a X?/La que te pida...>> ¿Cómo la que me pida? Yo no escucho hablar a la olla diciendo <<Saaaaaal, quiero saaaaaal...>> Luego está la versión <<Cuando veas que está hecho.>> Mamá, ESTOY APRENDIENDO A COCINAR y a mí a lo mejor me mola mucho el olor de las lentejas quemadas, o esa textura pardonegruzca del plumcake pero creo que el humo debería de indicarme algo... ¿No?

Te pasan recetas de postres (que suele ser más fácil y quedas la mar de resultón) y como no te especifiquen bien que hay que dejar hervir la cuajada para que haga efecto, en vez de "Tarta a los tres chocolates" tienes "Sorbete de tres chocolates con bizcocho flotando por encima"; un éxito, vaya.

Con tales comienzos, te desesperas sólo un pelín, pero al final te pones el mundo por montera, o el rodillo de amasar, cual versión casera de la campaña de Loewe, y tiras por el camino de enmedio. Coges recetas de la familia, de amigos o de libros de cocina (que, en un arranque, hace años que compré y que para lo único que han valido todo estos años es para que queden bonitos en la estantería) y terminas variando los ingredientes y cantidades a tu libre albedrío.

En mi defensa, hasta ahora, ni he envenenado a nadie ni he propagado una plaga de colitis entre mis amigos.


Y si os lo preguntáis, sigo sin saber hacer un arroz con habichuelas. Eso sí, tengo dos moldes de emplatar en el cajón, la mar de monos y resultones...


[Canción recomendada: Vainica Doble y Sabina "Con las manos en la masa"]

viernes, marzo 23, 2012

641. Retrato de un Dorian Gray de la huerta (O tirándome piedras en mi propio tejado)


Saber estar. 

Eso que muy poca gente tiene como innato, pero que se puede llegar a aprender, con indiferencia de que se termine adquiriendo como algo natural. El uso de los cubiertos, sonreír cuando toca, no hacer preguntas incómodas en según qué situaciones... Y tener algo de elegancia y consecuencia a la hora de vestir.

Siempre he sido de la opinión que hay que tener algo de estilo en la indumentaria. Ok, perfecto, viste a la moda, pero dentro de lo que se lleva, ponte lo que te sienta bien. No todo el mundo puede tener el morro de Beth Ditto y ponerse cualquier cosa, llevándola con dignidad. El vulgo, el pueblo llano, el que tiene una lorza de más y no sabe pasearla por el ruedo con el mismo tronío que la cantante de Gossip, tiene más problemas.

Cuando ya sabes que a tu cuerpo le queda mejor una cosa que otra, va casi todo rodado... El quid de la cuestión es saber cuándo dejar de ponerte una prenda. A eso sólo llegan unos cuantos. Mirad a Madonna y a la Preysler. Las dos tipazos, pero sólo a una de ellas se le ocurre quitarle la ropa a su hija pequeña para salir a la calle. ¿Morro o mamarrachismo? ¿ No saber estar? Que sí, que entras, guapa, que tienes tipazo, pero ¿no crees que te has pasado un pueblo?

Pues bien, algo así me está pasando últimamente.

Sí que es verdad que para los gaylors el tiempo corre de otra manera: al igual que un año de relación entre dos manfloritas podría ser el equivalente a 5 años de relación hetero; el inexorable paso del tiempo no hace tanta mella en nosotros. Será inmadurez, el hecho de que no tengamos hijos normalmente, el miedo al compromiso, qué se yo, lo de pasar la adolescencia entre finales de los 20 y mediados de los 30...

La cosa, está que siempre me he comprado la ropa en Pull&Bear, Spf o H&M, pero por edad debería de pasarme a Zara y Massimo Dutti... Vamos, aburguesarme. Lógico y normal si ya doblas en años al target de clientes en el que se focaliza esas marcas...

Me ha dado por repasar fotos antiguas y, atentados estilísticos aparte, es divertido darse cuenta que con 20 quieres aparentar tener 30 y con 30, 20. Y de eso a ser un mariclón de Anita Obregón, hay un paso:

1995 
(el grunge domesticao y esas cosas)
 

 

2000 
(camisas, perilla de chivo y pelos electrificaos)

2006
(algún toque bear de adulto, pero con look informal, para rebajar edad)


2012
(¿mamarrachaa, modernademierda o anitaobregón?)


...no sé qué sería peor, si verme en 15 años con un peto vaquero y camisa de rejilla o con un kimono de seda, caniches y mis discos de ópera...


[Canción recomendada: La Hora Chanante "El tiempo pasa... despacico"]

miércoles, marzo 21, 2012

640. Re-comeback



Volvemos. O vuelvo. No sé lo que me suena peor, si el plural (como si fuéramos más de uno los que escribimos aquí de manera regular) o el singular (sí, incongruente que soy, no me gusta llamar la atención más de lo justo y necesario.) 

En fin, que aquí estoy otra vez.

Lo mismo no hay ni Dios que lea el blog ya, pero será como llevar un diario en abierto. Si lo lee alguien, bien, si no, mis paridas no se quedarán en actualizaciones de Twitter (sigo sin pillarle el punto) o aquellas que sean demasiado largas para Facebook tendrán su espacio... Ahora está en saber cómo no pisarme a mí mismo y decidir qué pongo en un lado y qué pongo en otro...

¿Que dónde he estado? ¿Qué ha sido de mí desde septiembre hasta marzo? ¿Qué ha pasado en esos meses? Pues a pesar de que lo más claro y evidente es que ha pasado tiempo (y 10 kilos menos, que me está costando soltar el lastre...), mi vida no ha sido tan interesante como para que os diga que he estado este tiempo en la clínica Betty Ford en rehabilitación (Nooo, nooo, nooo) ni nada por el estilo. Ahora, no me digáis que no sería glamouroso que me hubiera ido allí, como una Elizabeth Taylor de provincias. 

No, soy de pueblo, pero no tan moderna. Simple y llanamente a finales de septiembre empecé a estudiar un máster online de Recursos Humanos (por hacer algo "de lo mío", como dirían por ahí) que no acabé hasta febrero. Enteded que trabajar a jornada completa y ser ama de casa a media jornada hace que tengas que sacar tiempo de donde no lo hay para estudiar, lo que termina pasando factura tanto a la vida 1.0, como a la 2.0 y a la 3.0 (si existe algo más allá.) 

Y como soy Virgo, con Plutón en casa 10 de Libra, (o algo así me dijo mi oráculo), todo se traduce en una simple triada: EXCESO-EXCESO-EXCESO. Me he apuntado a varios cursos más online y ahí ando, subrayando apuntes, haciendo prácticas (que mis profes a distancia se toman la libertad de criticar y luego fusilar como si fueran propias, todo sea dicho) y exámenes tipo tests.

Pero me ha vuelto a picar el gusanillo de escribir. Así que, en eso estamos. 

Espero que me dure.

[Canción recomendada: Amy Winehouse "Rehab"]


martes, marzo 20, 2012

639. Arrancás de caballo...



...y parás de burro.

Porque ya es casi un clásico volver a escribir por estos lares con la llegada de la primavera. Porque si la Increíble Abuela Elástica puede hacer un comeback, yo también. Y porque, ¡qué pijo!, me apetecía volver a escribir otra vez. 

Mañana ya os pongo al día con mi vida y qué me ha pasado (y qué no) en los últimos meses... si sigue habiendo alguien por ahí que me lea o que lea algo más que 140 caracteres...


[Canción recomendada: Madonna "Girl Gone Wild" ]